Vida
Cómo no voy a estar borracho de cariño,
Si ya desde que nací compartí tus vasos…. Sanguíneos.
Desde que niño tuve el oro en tu regazo
Ya no he vuelto a ver tesoros en los barcos de otros brazos.
Se va la flor, se va el color, se va su baile. Se….
Se va el dolor pero nunca el amor de madre.
He olvidado cuantas veces le robé besos al aire.
Por saber que tú con creces los mereces más que nadie.
Por guiarme en el camino recto cuando lo vi estrecho
Y obligarme a caminar derecho cuando escondí el pecho.
Por brindarme sin ningún despecho un lecho y un techo
Y haber hecho de un joven maltrecho alguien de provecho.
Gracias mamá por llevarme en tus entrañas
Y nadar entre pirañas buscando paliar mi sed.
Por cada vez que tú has secado mis pestañas
O has movido las montañas cuando menos tuve fe….
En corregir mis errores y en afrontar mi futuro,
Podré encontrar 1000 amores pero el nuestro es el más puro.
Que mi silencio sea el eco del orgullo.
que rebota en mi latido por estar unido al tuyo.
Y que mi ruido siempre sea una marea natural
Donde se filtre la lluvia de tus ojos cuando hay sal.
De qué sirve separarnos de un cordón umbilical
si los lazos afectivos nos unen hasta el final
Estribillo
Cuando tengo miedo al día tu haces que la luna salga
Y cuando la noche es fría le pides al Sol que arda.
La bondad que me protege teje el eje de tu espalda.
Nunca he visto a Dios pero si a su ángel de la guarda.
Que resguarda mi armonía que me acompaña y me guía.
Porque tú, mamá eres el maná cuando hay sequía
y aunque no existía un padre no extrañé su compañía
No hay un día de la madre, tu eres madre cada día.
No leí mejor poesía que las líneas de tus manos.
Por eso nací llorando esperándolas temprano.
no es el tiempo que profano, ni es el hueso ni la piel,
Es la herencia de tu ser la que me hace ser humano.
La belleza es una pluma que tropieza por tu duna.
Cuando abruma mi cabeza tu firmeza es la vacuna
Tu entereza es mi fortuna, tu tristeza mi laguna.
Con certeza: madre hay una desde la cuna a la luna.
Porque solo ella… sabe ser el mar que no te ahoga.
Porque sabe amar sabiendo lo que el corazón dialoga.
La única heroína que siempre te anima sin ser droga.
Y la única cuerda que nunca termina siendo soga.
Por eso te doy las gracias por sanarme las heridas
Por quitarme las astillas que dejaron las caídas.
Por espantar pesadillas con tu sonrisa encendida.
Y por haberme hecho el regalo más grande llamado: VIDA.