Hoy
Ya no encuentro sitio para mí
entre los hombres tristes de Madrid,
ya no bailo solo en discotecas
y el olvido se olvidó de mí.
Ya no te preocupan las teorías
del amor que va de flor en flor,
nadie imaginó que pasaría
dentro de tu helado corazón.
Fueron cataratas de deseo,
un big bang dentro del pecho,
noches débiles de ron.
Fueron tardes de querernos lento,
ganas de salir corriendo,
de saltar cualquier stop.
Hoy,
que empezó mi nueva vida,
que has doblado mis esquinas,
que espantaste a mi dolor.
Hoy,
que te siento un poco mía,
que me muero de poesía
cuando vienes con tu voz:
a poner un beso en cada adiós.
Ya no hay soledad oliendo a invierno,
ni terapias para el desamor,
hemos jubilado los complejos
y en un mar abierto el corazón,
nada, ya no hay nada que me asuste,
desde que te vi lo supe,
y por eso te busqué.
Hoy,
que empezó mi nueva vida,
que has doblado mis esquinas,
que espantaste a mi dolor.
Hoy,
que te siento un poco mía,
que me muero de poesía
cuando vienes con tu voz:
a poner un beso en cada adiós.