Cosas de la Vida
Si fuiste una hombre muy malo
Después de haberte amado tanto,
Trocaste mi cariño santo
Quizá por otro, lleno de ilusión.
Pero el tiempo será testigo
Cuando comprendas que la ingrata,
Que ha sido para vos, tu ñata
Supo quererte con todo el corazón.
Mas no te olvides
Que sos padre de un hijo,
A quien con regocijo
Lo cuido con locura,
Fruto de nuestro amor.
De nuestro amor sagrado
Que ya te has olvidado,
También de ese Ricura!.
Tu proceder
Se hundió en mi corazón,
Matando la pasión
Que acariciaba ayer.
Pero por todo el daño
Que me hiciste, Cobarde!,
Has de sufrir más tarde
Mi eterna maldición.
Alguna vez, cuando tu suerte
Cambie, como cambió la mía,
Sabrás todo el dolor que un día
Dejaste en mi almita de mujer.
Y entonces no hallarás siquiera
Ni el solo perdón de tu hijito,
Mi dulce amigo, Pobrecito!
Que me acompaña en la vida a padecer.