Volvió la Princesita
Geronimo Sureda
Como una Ilusión marina
La radiante princesa volvió,
Para cuidar de aquel faro
Porque el viejo farero enfermó
Y los errantes marinos
Como ayer le cantaron su amor,
Y en las barcas de los pescadores
Un vals destrenzaba, un viejo acordeón.