Para Qué
Para qué seguir sufriendo,
vivir así ya no es vida,
es tan mortal esta herida
que sangra cruel de mi pecho.
Ya no aguanto más, me muero...
Corazón, ya lo has perdido,
dame tu último latido
corazón, estás deshecho.
Para qué rogar en vano
recordando sus promesas,
para qué llorar mis penas,
para qué implorar que vuelva
si marchito está su amor;
para qué buscar su mano
tabla de mi salvación,
si de mí ya ni el recuerdo quedó,
para qué, mi Dios.
Ya comprenderás un día
mis penas y mis desvelos.
Me están matando los celos,
no tengo paz, ni alegría.
Pero no, si vos mentías
para qué seguir sufriendo,
ya no aguanto más, me muero,
corazón, esto no es vida.